En el mundo genial de las cosas que dices

miércoles, 15 de junio de 2011


En el mundo genial de las cosas que dices todo iría sobre ruedas. Las cosas saldrían solas porque los "quiero" serían mucho más fuertes que los "no puedo". No habría gente que no quisieramos incluir, y aquellos que estan dentro no nos harían ningún mal, ni nos pondrían ningún obstaculo, sino que nos ayudarían a pasar los que se nos presentan. Pero sobre todo, ese mundo giraría solo por tí y por mí.
Es una pena que no exista ese mundo...
Es una pena que lo hayas destruido antes de empezar a vivir en él, sólo porque has dado más importancia al "no puedo" que al "quiero". Habría sido increíble, y estoy segura de que sería el mundo más bonito que he visitado con nadie.
A cambio de tus "no puedo" y de las razones que me has dado, te diré que espero que algún día aprendas que el sufrimiento es parte de la vida, y rechazarlo es rechazar parte de tí, de tus experiencias. El amor siempre hace daño, pero nos es tan necesario vivirlo porque a veces todo lo bueno que te da ese sentimiento y toda la felicidad que te llega al sentirlo plenamente con otra persona compensa en el caso de que haya un sufrimiento al final.
No amar por miedo a sufrir es como no comer por miedo a que te siente mal; al principio funciona, pero a la larga la necesidad es tan grande que acabas rindiéndote por completo y, en el caso del amor, casi siempre con la primera persona que se te cruza, por necesidad, por sed, porque no puedes aguantarlo más. Y la mayoría de las veces, esa persona no es la correcta y acabas sufriendo aún más.
Sería una osadía decir que la persona correcta la tienes delante, porque ni siquiera sé si existe la persona correcta, pero te aseguro que por la persona que tienes delante merece la pena que lo intentes, que arriesgues un poco, te aseguro que esa persona lo arriesgaría todo, te aseguro que te daría buenos momentos y seguro que intentaría con todas sus fuerzas no darte momentos malos o, al menos, compensarlos con una felicidad gigantesca. Porque te aseguro que esa persona que tienes delante ha sufrido por amor tanto como tú, y aún así está dispuesta a lanzarse contigo, por el simple hecho de que te quiere. No necesita más argumentos que ese.
Pero por lo visto tú sí.

Gracias

lunes, 6 de junio de 2011

He oído muchas veces que las cosas buenas, las cosas que merecen la pena, se hacen esperar. Es tristemente cierto. Triste porque me gustaría que no fuera tan larga la epera. Cierto cuando un fin de semana te compensa todo un año de espera.
Este fin de semana ha sido muy importante para mi, y no solo porque haya vuelto a veros, porque os echara de menos o porque haya sido incluso mejor que el del año pasado (cosa que parecía increible, al menos para mi) sino porque he descubierto lo importante que sois para mi, porque me habeis animado a hacer cosas que me gustan, porque me habeis apoyado para que acabe lo que empiezo y porque me he dado cuenta de que os quiero cada día más y que la distancia no hace que eso cambie.
Muchos de vosotros no habias pasado nunca por aquí, no habíais leído este blog. En cierto modo me alegro, porque lo primero que leeréis será esto, y es unica y exclusivamente para vosotros. Aunque me parece muy poco para lo que quiero decir, no se me ocurre otro modo de expresarme que dando las gracias...

Gracias por las risas,
Gracias por las lágrimas,
Gracias por las recomendaciones literarias,
Gracias por vuestras palabras, que espero ver publicadas,
Gracias por querer leer las mias,
Gracias por vuestra confianza,
Gracias por el apoyo incondicional,
Gracias por las fotos,
Gracias por las borracheras sin alcohol,
Gracias por los paseos nocturnos por Madrid,
Gracias por las frases míticas,
Gracias por la mamada,
Gracias por el mal de ojo de la gitana,
Gracias por la mejor silla del mundo,
Gracias por los repartos "equitativos y justos" de hombres imaginarios,
Gracias por los animales inteligentes...

Me dejo un millón de cosas, pero seguiría sin ser ssuficiente. Está claro que las palabras, que hasta ahora no han hecho más que unirnos, han dejado de ser suficiente para expresar lo que significais para mi. Supongo que, en el fondo, todo se resume en un simple "Os Quiero Muchísimo" cargado de sentimientos, en un "Os Echo de Menos" cargado de deseos, en un "Sois Increibles" cargado de admiración y en un "Espero Seguir Siempre Aquí Para Vosotros" cargado de sueños, ilusiones y esperanzas.
Gracias, en definitiva, por convertirme en una persona llena de vida por el simple hecho de estar cerca.

Os adoro

Emma