Lo que de verdad importa

sábado, 21 de febrero de 2015

Hoy he decidido pasarme por aquí porque este último mes he sacado un aprendizaje importante y quería compartirlo.

Siempre he sido una persona extrovertida, que intenta que todos a su alrededor se sientan bien, que nadie pase por cosas malas si puedo evitarlo, que no pasen las penas solos si no puedo hacer nada para quitárselas. Los que me conocen saben que siempre he priorizado a mis amigos, familia, y gente que me rodea en general por delante de mi misma.

El caso es que, por suerte o por desgracia, no concibo una relación de ningún tipo sin que exista un intercambio. Esto no significa que haga lo que hago solo por recibir el mismo trato, ni siquiera uno parecido. Simplemente lo hago porque me apetece hacer feliz o ayudar, dentro de mis posibilidades, a la gente que me importa.

Sin embargo, confieso que, a veces, si que espero recibir en lugar de dar. Bien porque lo necesite o bien porque lo quiero, las relaciones de cualquier tipo son bidireccionales, una carretera de doble sentido. 

En este último mes he descubierto quien esta dispuesto a ese intercambio y quien no. Debo reconocer que me ha sorprendido la cantidad de cosas bonitas y promesas que salen por la boca de alguien cuando la relación que hay entre vosotros es estable, segura y fácil. Pero cuando hay que superar una distancia, un obstáculo emocional, o un problema en general, ya las cosas no se ven tan claras. Ya puedes haber estado siempre para esa persona, haberle ayudado incluso cuando no lo pedia, haber hecho sacrificios personales solo por su beneficio, que todo parece caer en el olvido cuando llamas diciendo "necesito un favor".

A todos aquellos que no están dispuestos a ofrecer su mitad, no os preocupéis, no voy a crucificaros ni apartaros de mi vida, simplemente me lo pensaré dos veces antes de anteponeros a mi misma. A los demás, habéis conseguido que me dé cuenta de lo que de verdad importa. A partir de ahora os valoraré aún más, si es eso posible. Gracias.

0 comentarios:

Publicar un comentario